Itinerario de 5 días en Manhattan Itinerario

Comienza tu día visitando Central Park. Hay muchas actividades divertidas para niños, como alquilar bicicletas o visitar el zoológico del parque.

Después del parque, dirígete a Catedral de San Patricio de Nueva York para admirar su impresionante arquitectura. Almuerza en un café cercano que ofrezca opciones económicas.

Por la tarde, explora Broadway. Aunque los boletos pueden ser caros, simplemente caminar por la zona y disfrutar del ambiente puede ser muy divertido.

Visita el Monumento Conmemorativo y Museo Nacional del 11 de Septiembre. Es un lugar importante para aprender sobre la historia reciente y rendir homenaje a las víctimas.

Luego, dirígete al One World Observatory para obtener vistas impresionantes desde uno de los edificios más altos del hemisferio occidental. Almuerza en el área financiera donde hay varias opciones económicas.

Termina el día explorando Wall Street. Aunque no está en la lista específica, es cercano al observatorio y ofrece una visión interesante del mundo financiero.

Comienza tu día explorando Barrio chino de la ciudad de Nueva York. Es un lugar vibrante con muchas tiendas interesantes y lugares económicos para desayunar.

Después, camina hacia Little Italy donde puedes disfrutar de un almuerzo delicioso sin gastar mucho dinero. La atmósfera es encantadora y perfecta para pasear con niños.

Termina el día visitando DUMBO en Brooklyn (cerca). Puedes tomar fotos increíbles del puente de Brooklyn y disfrutar del ambiente relajado.

Comienza tu último día en Manhattan con una visita al Parque del puente de Brooklyn. Este parque ofrece hermosas vistas del puente de Brooklyn y es un lugar perfecto para que los niños corran y jueguen.

Después, dirígete a Chelsea Market para almorzar. Este mercado es conocido por su variedad de opciones gastronómicas asequibles y deliciosas. Además, el ambiente es muy animado y divertido para explorar.

Termina tu día y tu viaje con una visita a Bryant Park. Este parque es un lugar encantador para relajarse, disfrutar de un helado o simplemente sentarse y ver pasar a la gente. Es un cierre perfecto para una semana llena de aventuras en Manhattan.